¿Qué hace un antioxidante?

¿Qué hace un antioxidante?

Los antioxidantes desempeñan un papel esencial en una alimentación sana. Presentes de forma natural en frutas y verduras, oligoelementos e incluso ciertos complementos alimenticios, estas moléculas tienen propiedades antioxidantes que protegen al organismo contra diversos tipos de daños.

Radicales libres y estrés oxidativo

Para comprender el papel de los antioxidantes, primero debemos entender qué son los radicales libres.

Los radicales libres son moléculas que se forman de forma natural en nuestro organismo y que son muy reactivas. Se comportan un poco como "ladrones" que intentan estabilizarse tomando electrones de otras moléculas. Éstas son las principales formas en que nuestro cuerpo produce radicales libres:

1. Producción de energía por las células

Nuestras células necesitan energía para funcionar, que producen quemando los nutrientes que consumimos (como la glucosa). Este proceso, que tiene lugar en las mitocondrias (las pequeñas fábricas de energía de las células), utiliza el oxígeno que respiramos. Al convertir los nutrientes en energía, las células también generan productos de desecho, algunos de los cuales son radicales libres. Piense en ellos como en el humo de un motor en marcha.

2. Las defensas del organismo contra las infecciones

Nuestro sistema inmunitario también utiliza los radicales libres para defenderse de microbios como bacterias y virus. Las células inmunitarias, nuestros "soldados de defensa", liberan radicales libres para atacar y destruir a los invasores. Sin embargo, esta "batalla" también puede causar daños colaterales a las células sanas circundantes si el organismo no controla adecuadamente los radicales libres.

3. Factores externos y medioambientales

Nuestro cuerpo también produce radicales libres en respuesta a factores externos como la contaminación, el humo del tabaco, los rayos UV del sol e incluso ciertos medicamentos o sustancias químicas. Por ejemplo, cuando nuestra piel se expone al sol sin protección, los rayos UV provocan un aumento de los radicales libres, que pueden dañar las células cutáneas y causar quemaduras solares o acelerar el envejecimiento de la piel.

En resumen, los radicales libres son subproductos inevitables de nuestras funciones corporales normales, pero pueden llegar a ser problemáticos si se producen en exceso. Ahí es donde entran en juego los antioxidantes, que ayudan a neutralizar estos radicales libres antes de que causen demasiados daños.

Antioxidantes: defensores de nuestras células

Las moléculas antioxidantes actúan como defensores contra los radicales libres. Neutralizan estas moléculas inestables antes de que puedan dañar las células. Por ejemplo, antioxidantes como la vitamina C, la vitamina E, el β-caroteno (precursor de la vitamina A) y el selenio son esenciales para neutralizar los radicales libres y limitar el estrés oxidativo.

Los antioxidantes se asocian a menudo con efectos antienvejecimiento por su capacidad para proteger las células de los daños. También desempeñan un papel clave en la prevención de diversas enfermedades, ya que refuerzan el sistema inmunitario y favorecen la reparación celular.

Alimentos ricos en antioxidantes

Una dieta rica en frutas y verduras es una fuente ideal de antioxidantes. Entre los alimentos ricos en antioxidantes se encuentran los frutos rojos (como los arándanos, las fresas y las frambuesas), el té verde, el chocolate negro y las pacanas. Cada uno de estos alimentos tiene una capacidad antioxidante medible, a menudo expresada por elíndice ORAC (Oxygen Radical Absorbance Capacity), que evalúa la capacidad de un alimento para absorber radicales libres.

Complementos alimenticios y antioxidantes

Aunque una dieta equilibrada puede aportar suficientes antioxidantes, algunas personas optan por los complementos alimenticios para suplir cualquier carencia. Sin embargo, es importante recordar que la toma de suplementos debe supervisarse, ya que a veces un exceso de antioxidantes puede ser perjudicial.

¿Cuál es su rutina de belleza antioxidante?

Para una rutina de belleza antioxidante eficaz, es importante proteger la piel contra los daños causados por los radicales libres, como el envejecimiento prematuro, las arrugas, las manchas oscuras y la pérdida de elasticidad. He aquí una rutina de cuidado de la piel que incluye productos ricos en antioxidantes y pasos para maximizar su efecto protector:

1. Limpieza suave (mañana y noche)

Empieza con un limpiador suave para eliminar las impurezas, el maquillaje y el exceso de sebo sin dañar la piel. Elige un producto que contenga ingredientes calmantes e hidratantes comoel aloe vera o la camomila, que preparan la piel para recibir tratamientos antioxidantes.

2. Tónico hidratante

Tras la limpieza, utiliza un tónico hidratante que contenga ingredientes antioxidantes como vitamina C, vitamina E o extractos de té verde. Estos ingredientes ayudan a reequilibrar el pH de la piel al tiempo que proporcionan una primera capa de protección contra los radicales libres.

3. Suero antioxidante

Un sérum es un potente concentrado de nutrientes que penetra profundamente en la piel. Elija un sérum rico en antioxidantes como la vitamina C (para iluminar la piel y estimular el colágeno), retinol o β-caroteno (para la regeneración celular), o polifenoles (como los del té verde o los frutos rojos) para neutralizar los radicales libres. Aplicar unas gotas sobre el rostro y el cuello, masajeando suavemente.

4. Crema hidratante con antioxidantes

Opte por una crema hidratante que contenga ingredientes antioxidantes como la coenzima Q10, la niacinamida (vitamina B3) o aceites vegetales ricos en antioxidantes como el aceite de pepitas de uva o el aceite de jojoba. Una buena hidratación ayuda a reforzar la barrera cutánea y a optimizar la eficacia de los antioxidantes.

5. Protección solar (por la mañana)

El sol es una de las principales fuentes de radicales libres, por lo que es esencial utilizar protección solar de amplio espectro (FPS 30 o superior) todas las mañanas, incluso en días nublados. Algunas cremas solares contienen antioxidantes como el té verde o la vitamina E para una protección extra contra los daños causados por los rayos UV.

6. Mascarilla antioxidante (1-2 veces por semana)

Incorpora una mascarilla rica en antioxidantes a tu rutina semanal. Elige una mascarilla que contenga ingredientes como té verde, vitaminas C y E, o extractos de bayas (como arándanos o frambuesas). Esto ayudará a nutrir y revitalizar la piel en profundidad, al tiempo que proporciona una dosis concentrada de antioxidantes.

7. Crema de noche regeneradora (por la noche)

Antes de acostarse, aplíquese una crema de noche que contenga ingredientes antioxidantes como retinol o retinaldehído (vitamina A) y péptidos. Estos ingredientes favorecen la renovación celular y ayudan a la piel a repararse durante la noche.

Ingredientes cosméticos antioxidantes

1. Vitamina C estabilizada (ácido ascórbico y sus derivados)

La vitamina C es uno de los antioxidantes más eficaces para la piel, pero también es muy inestable y puede degradarse rápidamente cuando se expone al aire y a la luz. Para mejorar su estabilidad, se han desarrollado formas derivadas, comoel ascorbil fosfato sódico oel ascorbil glucósido. Estos derivados son más estables y permiten que la vitamina C se libere gradualmente en la piel, maximizando sus efectos antioxidantes y aclaradores de la piel.

2. Niacinamida (vitamina B3)

La niacinamida es una forma de vitamina B3 con potentes propiedades antioxidantes. Ayuda a reducir las rojeces, unifica el tono de la piel, refuerza la barrera cutánea y minimiza los efectos de los radicales libres. Es especialmente apreciada por su estabilidad y su capacidad para combinarse con otros ingredientes activos sin causar irritación.

3. Resveratrol

El resveratrol es un polifenol extraído principalmente de la uva y el vino tinto. Es un potente antioxidante conocido por sus propiedades antiinflamatorias y antienvejecimiento. Las versiones estabilizadas del resveratrol se utilizan en el cuidado de la piel para protegerla de los rayos UV y mejorar la apariencia de las líneas de expresión y las arrugas.

4. Glutatión

El glutatión es un tripéptido presente de forma natural en el organismo, conocido por ser un antioxidante muy potente. Neutraliza los radicales libres y ayuda a reciclar otros antioxidantes como las vitaminas C y E. En cosmética, se utilizan fórmulas mejoradas y estables de glutatión por sus efectos aclarantes y antienvejecimiento.

5. Coenzima Q10 (Ubiquinona)

La coenzima Q10 es una molécula natural del organismo que desempeña un papel clave en la producción de energía celular y la protección antioxidante. Se utiliza a menudo en cremas y sueros por su capacidad para reducir los daños causados por los radicales libres, mejorar la elasticidad de la piel y reducir la aparición de arrugas.

6. Ácido ferúlico

El ácido ferúlico es un antioxidante extraído de plantas como el arroz, la avena y el café. Suele utilizarse en combinación con las vitaminas C y E para estabilizarlas y aumentar su eficacia antioxidante. Ayuda a neutralizar los radicales libres y a proteger la piel del daño solar.

7. EGCG (galato de epigalocatequina)

El EGCG es el principal polifenol del té verde. Tiene potentes propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Utilizado en el cuidado de la piel, ayuda a reducir los daños causados por los rayos UV, calma la inflamación y protege contra el envejecimiento prematuro de la piel.

8. Extractos de células madre vegetales

Las células madre vegetales se utilizan por sus propiedades reparadoras y antioxidantes. Por ejemplo, los extractos de células madre de manzana, argán y uva contienen antioxidantes naturales que protegen la piel de los daños ambientales y favorecen la renovación celular.

9. Astaxantina

La astaxantina es un carotenoide extraído principalmente de microalgas, que tiene un poder antioxidante muy superior al de la vitamina C o la vitamina E. Protege las células frente al estrés oxidativo, ayuda a mejorar la elasticidad de la piel y reduce las arrugas y las manchas de la edad.

10. Péptidos antioxidantes

Los péptidos son pequeñas cadenas de aminoácidos que pueden estimular la producción de colágeno y actuar como antioxidantes. Algunos péptidos se han desarrollado para ofrecer efectos antienvejecimiento al tiempo que protegen la piel de los daños causados por los radicales libres.

11. Fullerenos

Los fullerenos son moléculas de carbono con una estructura única en forma de bola. Tienen un potente efecto antioxidante y son capaces de neutralizar un gran número de radicales libres. Utilizados en algunos productos cosméticos de alta tecnología, son apreciados por su capacidad para penetrar profundamente en la piel y proporcionar una protección duradera contra el envejecimiento.

12. Hidroxitirosol

El hidroxitirosol es un potente polifenol extraído de las aceitunas. Es conocido por su fuerte actividad antioxidante y sus propiedades antiinflamatorias. Ayuda a proteger la piel de los daños causados por los radicales libres y mejora su elasticidad.

Conclusión

Los antioxidantes son moléculas esenciales para nuestra salud. Su función es proteger las células contra los daños causados por los radicales libres y reducir el estrés oxidativo. Para aprovechar sus beneficios, recomendamos consumir regularmente alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y verduras, té verde, chocolate negro y frutos secos. Seguir una dieta rica en antioxidantes es una forma eficaz de mejorar nuestra salud y prevenir el envejecimiento celular.

Volver al blog